Las oportunidades en los Estados Unidos se van desvaneciendo como una gota de agua en el firmamento.

   El Sueño Americano es más ilusorio que nunca. El problema de los trabajos se incrementa para las minorías étnicas en una sociedad que todavía no ha podido, a pesar de la Acción Afirmativa, deshacerse de los demonios del racismo y todos esos rasgos de etnocentrismo, que durante el auge del libre comercio, brilló y mantuvo a millones de americanos inmersos en el abandono social.

   La Acción Afirmativa se fue y con ellas también se fueron las oportunidades de un bien social laboral para muchos ciudadanos Americanos de etnias y nacionalidades minoritarias.

   Paradójicamente, sin embargo, y muy triste por cierto, la situación de que muchos Americanos pertenecientes a las mayoría sociales —es decir a los Europeos-Americanos—tampoco han podido encontrar trabajos bien pagados dentro del paradigma social norteamericano.

   Los trabajos profesionales son casi inexistentes, particularmente en esta coyuntura económica en que el sector público está siendo acosado fuertemente por una corriente neoliberal y neoconservadora que quiere privatizar hasta el trabajo de los policías, los bomberos y los trabajos administrativos.

   Sin embargo, la fuerza del individuo nunca se agota. Ante un clima de negatividad laboral, el individuo busca por una oportunidad de vida en los rincones más inhóspitos del país. Incluso, algunos que han utilizado todos los recursos para encontrar trabajo, lo hacen en otros países.

   Un gran amigo mío, Dan Barkley, es un gran ejemplo. Egresó de la Universidad de California Los Ángeles (UCLA) con el título de Ingeniería. Luego, después de trabajar unos cuantos años en el sector aerodinámico, volvió a la universidad para completar sus estudios de posgrado.

   Ingresó a la Universidad de California Irvine, en el departamento de Economía.  Allí lo conocí. Fue mi fue asistente del profesorado (Teaching Assistant) en una clase de estadística. Desde ese momento, nuestra relación de amigos perduró hasta siempre.

   Después de su graduación como doctor en Economía de la Universidad de California, Irvine, las oportunidades de profesorado de tiempo parcial fueron desde los colegios comunitarios hasta las universidades más prestigiosas del Estado de California.

   Sin embargo, las oportunidades de trabajo de tiempo completo fueron nulas. A pesar de que hizo petición a las mismas universidades donde trabajó en forma adjunta y otras en otros estados de la nación, la respuesta siempre fue negativa.

   Como muchos profesionales de su generación, las opciones se acortaron en el país. Sin embargo, su capacidad y sus ganas de triunfar no se detuvieron en nuestro entorno.

   El Dr. Barkley recientemente fue invitado para dar clases de tiempo completo en la Universidad Americana de Nigeria, allá en el continente africano. De acuerdo a lo que le plantearon, las opciones laborales son tan, o tal vez mejores, que muchas universidades norteamericanas. Su puesto también incluye investigación académica.

   Año tras años vemos con mucho orgullo la terminación exitosa de muchos jóvenes profesionales de las diversas universidades existente en nuestro país.  Lamentablemente, una vez egresado, pocos son los que alcanzan aquel sueño dorado de tener un trabajo de acuerdo a sus capacidades.