Dancing After School: Mejorando las vidas de los niños a través del baile
Cuando Walter Meneses comenzó a bailar salsa profesionalmente ya como adulto hace más de 20 años, comenzó a ver cambios positivos en su vida. Estaba más saludable, con más energía y su actitud hacía la vida cambió completamente para lo mejor.
A través de los años, comenzó a pensar cómo su vida hubiera sido diferente si hubiera comenzado a bailar desde que era niño. También, comenzó a preguntarse cómo el baile podría impactar las vidas de tantos niños de familias trabajadoras en San Diego.
Fue entonces que en el 2006 decidió crear Dancing
After School, un programa que ofrece clases gratis de baile y arte a niños por todo el Condado de San Diego.
“Si el baile tuvo un impacto positive en mi vida como adulto, solo podía imaginarme todas las cosas buenas, todos los beneficios que los niños recibirían a través del baile”, dijo Meneses. “Yo quería compartir mi amor por el baile, porque el baile cambio mi vida para lo mejor”.
Desde el 2006, Dancing After School ha brindado clases gratis a más de 3 mil niños en 28 escuelas del Condado de San Diego.
Ahora, Meneses, uno de los promotores de salsa más activos en San Diego, está expandiendo su visión y está invitando a la comunidad a ayudar a que el baile esté disponible para los niños en el mayor número posible de escuelas en San Diego.
Dancing After School, que está registrada como una organización sin fines de lucro, está cambiando la manera en que recauda fondos para sus programas.
Antes, la organización dependía en empresas y organizaciones grandes para hacer enormes donativos para proveer los servicios gratuitos a las escuelas.
Cuando la economía comenzó a afectar la cantidad que esas empresas y organizaciones estaban donando, Dancing After School tuvo que disminuir el número de clases que ofrecía, dijo la directora operativa, Jeanette Meneses.
“Teníamos que depender en grandes donativos de grandes donantes para poder sobrevivir”, dijo. “Era muy limitante”.
Los Meneses ahora están invitando a la comunidad a ser donantes como parte de la recién lanzada campaña de Dancing After School, You + $2 + 2 Friends, en la que usted dona $2 al mes y alienta a dos de sus amigos a hacer lo mismo.
“$2 es menos de lo que uno gasta en una taza de café y esos $2 pueden hacer una gran diferencia en las vidas de los niños”, dijo Walter Meneses.
Meneses dijo que espera que este nuevo método para recaudar fondos, que están llamando la Donation Network DAS, ayudará a la organización a tener un presupuesto más flexible y confiable mientras que no tienen que depender en grandes donativos, aunque continuarán solicitando fondos y becas para las artes.
La meta de Meneses es recaudar $300,000 antes de que termine este año. Las clases de baile iniciarán con el nuevo año escolar, en septiembre. Dijo que, en promedio, un programa de 10 semanas cuesta a la organización unos $1,400. Añadió que cerca del 88 por ciento de los gastos es para cubrir los salarios de los instructores.
Una de las ventajas de donar $2 o más es que los donantes pueden recomendar al momento de hacer su donativo que escuela quieren que sea incluida en el programa. Si muchos donantes recomiendan la misma escuela, es muy posible que esa escuela se beneficie de las lecciones de baile, dijo Jeanette Meneses.
Añadió que Dancing After School comenzará a promocionar el programa de recaudación de fondos en las escuelas de todo el condado.
Entre los beneficios que los niños reciben a través de Dancing After School están una reducción en el sobrepeso y un incremento en la confianza propia, dijo Walter Meneses.
“Pienso que la gente verá la visión de nuestro programa y se unirán a nosotros”, dijo. “Nuestros niños merecen tener al baile en sus vidas”.
Para conocer más acerca de Dancing After School y para hacer un donativo, por favor visite www.dancingafterschool.org.