Día del Padre trae buenos recuerdos para muchos latinos
Este domingo 19 de junio se celebra el Día del Padre. Aunque entre los latinos de San Diego se celebra más el Día de las Madres, los papás tienen un lugar muy importante en la familia y en el corazón de los hijos.
Entre los sandieguinos hay muchos buenos recuerdos de su padre. Algunos dicen que fue su modelo a seguir mientras que otros aseguran que su esfuerzo por sacar adelante a la familia ha sido una inspiración durante toda su vida.
“Tengo muchos recuerdos de mi padre”, dijo Gabriel Lavería, de 31 años, vive en San Diego. “Me ha ayudado mucho a salir adelante”.
Juan Hernández, de 27 años, quien vive en San Diego, también ha visto en su padre a un ejemplo de vida, alguien a quien imitar y admirar.
“Todos los recuerdos de mi papá son buenos”, dijo He-rnández. “Es una buena persona y un gran ejemplo para mí”.
Personas ya mayores aún conservan hermosos recuerdos de sus padres. Tal es el caso de Doña Rosa Villegas, quien a sus 63 años, lleva a su padre en el corazón y la memoria por siempre.
“Son recuerdos maravillosos”, dijo la señora que radica en National City. “Fue un muy buen padre”.
Algunas personas recuerdan actividades que hacían junto a su papá, como salir al campo o al parque.
“Nos íbamos de pesca en Ohio y siempre nos hacia reír”, recuerda Maryland Kerlin, de 68 años, y quien vive en Imperial Beach. “Era un hombre con un gran sentido del humor”.
Lamentablemente, hay veces en que los padres no toman sus responsabilidades y se olvidan de los hijos que engendraron. Una canción clásica de Los Tigres del Norte, “El macho y el hombre”, dice: “Macho es el que deja hijos por doquiera, hombre es el que cria, los guía, los educa y les da de comer”.
Brenda Valdez, de 19 años, dice que ella, desgraciadamente, vivió alejada de su padre durante su niñez y adolescencia.
“No tengo ningún recuerdo porque no viví nunca con él”, dice Valdez.
Otras veces, las madres hacen el papel de padre también. Ellas mismas sacan adelante a sus hijos, trabajando dos empleos, atendiendo el hogar, ayudando con las tareas, cuidándolos cuando están enfermos, dándoles de comer.
A esas madres que también son padres, igual se les debe celebrar este domingo.
“Mi mamá fue padre y madre para mí”, dijo Alisia López, de 18 años, residente de San Ysidro.
Al igual que muchos, mi padre siempre proveyó todo lo necesario para mi familia. Ahora que yo soy padre de dos niños, es mi turno de hacer lo mismo –es más, es mi turno hasta de tratar de superar a mi padre. Nunca es suficiente lo que un padre puede hacer por sus hijos. Y no sólo es un papel que toca a las madres: nosotros los hombres también somos capaces de dar mucho amor, cariño, comprensión y una mano amiga en quien los hijos pueden confiar.
Por eso, este domingo, que será el séptimo día del padre que celebro, refrendo mi compromiso con mis hijos de siempre estar ahí para ellos, dándoles mi atención, tiempo y esfuerzo.
Es lo menos que puedo hacer, ya que ellos bendicen mi vida todos los días.