El ex pelotero mexicano Esteban Loaiza fue sentenciado a tres años en prisión luego de que aceptara su responsabilidad por el delito de posesión con intención de distribución de 20 kilogramos de cocaína.

Loaiza de 47 años, estuvo acompañado de sus padres, hermanos, primos, hijo y exesposa durante la audiencia realizada el pasado viernes 8 de marzo en la corte federal de San Diego, California.
El ex ligamayorista afrontaba una condena mínima de diez años, pero la jueza Janis Sammartino tomó en consideración los antecedentes del pelotero, así como el hecho de que éste se declaró culpable de la acusación, además que según se dio a conocer, padece de diabetes.

“Este no es el tipo de persona que soy”, aseguró el ex beisbolista a la jueza antes de escuchar su sentencia, quien ofreció una disculpa a su familia, amigos y aficionados tanto de México como Estados Unidos.

Una vez que concluya su sentencia, el viudo de la cantante Jenni Rivera quien naciera en Tijuana, será deportado a México, según dio a conocer su abogada Janice Deaton.

Loaiza fue detenido el pasado 9 de febrero de 2018 en una residencia que recién había alquilado en Imperial Beach. En su testimonio, aceptó haber tomado un automóvil Mercedes-Benz con un cargamento de 20 kilogramos de cocaína, el cual debía trasladar a otro vehículo estacionado en dicho lugar.

“Como atleta profesional, Esteban Loaiza ganó decenas de millones de dólares y la admiración de aficionados del béisbol tanto en México como Estados Unidos”, declaró el fiscal federal Robert Brewer. “Y aún así, sacrificó su reputación y ahora, su libertad, para convertirse en un traficante de cocaína. Nadie está por encima de la ley, y eso incluye a pitchers estrellas de las Grandes Ligas”, agregó.

No obstante, la fiscalía había solicitado una sentencia más alta, dado la “cantidad considerable” de cocaína con la que fue detenido.

“Esa cantidad representa decenas de miles de dosis de droga altamente adictiva que frecuentemente tiene un impacto devastador en las vidas de muchas personas, no solo en nuestra comunidad sino más allá”, refirió el fiscal asignado al caso, Larry Casper.

Como beisbolista profesional, Loaiza llegó a las Grandes Ligas en donde jugó entre 1995 y 2008 en equipos como los Yanquis de Nueva York, los Piratas de Pittsburgh, los Dodgers de Los Ángeles y los Medias Blancas de Chicago, entre otros.

En éste último, tuvo marca de 21-9 en la temporada 2003 y terminó en segundo lugar de la votación por el Cy Young, además que inició el Juego de Estrellas.

La jueza Sammartino, reconoció los logros de Loaiza en Grandes Ligas los cuales dijo, no le restan seriedad a la ofensa que cometió y lo invitó a “retomar el camino” ya que termine con su condena.

“La historia cambia. No es una historia de éxito, pero todavía es algo de lo que la gente puede aprender”, señaló.

La abogada del pelotero declaró a medios de comunicación que su cliente reconoció su error y una vez que cumpla con su castigo espera acercarse a jóvenes deportistas para exhortarlos a alejarse de “malas compañías”, para que nadie más pase por la misma situación.

La jueza permitió que el exjugador continúe bajo libertad condicional, pero deberá entregarse a las autoridades el próximo 19 de abril para iniciar el tiempo de su sentencia.