San Diego se sumó a las zonas fronterizas de Estados Unidos que refuerzan su muro fronterizo como forma de intentar detener la migración ilegal y el tráfico de drogas a través de los límites de California y México.

La obra que se ejecuta en la frontera de San Diego con Tijuana, y se realiza por parte de la corporación SLSCO con sede en Texas, se encuentra valorado en 147 millones de dólares, recursos que asegura la patrulla fronteriza en San Diego son bien implementados y ayudaran en la reducción las entradas ilegales en las 60 millas de frontera que existe en el sector y que se comparten con México.

“La construcción de este nuevo muro mejorará la protección fronteriza en general, la seguridad y eficacia de los agentes de la Patrulla Fronteriza, la seguridad del público y mejorará la atmósfera para los negocios y el comercio en el área”, dijo Rodney Scott, director del sector San Diego de la Patrulla Fronteriza.

El tramo del actual muro que será reemplazado es de 14 millas y tiene un promedio de 10 pies de altura. Esta barrera fue construida en la década de los 90 con restos de metal reciclado y antiguas placas de acero de la plataforma de desembarco utilizada en la guerra de Vietnam.

Este proyecto de reforzamiento del muro, dijeron las autoridades federales, se suma a la serie de proyectos que ya se realizan en el resto de las zonas fronterizas del país, que incluyen a la zona de Calexico, California y un total de 20 millas en Santa Teresa, Nuevo México.

Las autoridades dijeron el refuerzo del muro es una necesidad para la comunidad en San Diego y la seguridad de los agentes fronterizos, ante el incremento de ataques a oficiales de la patrulla fronteriza que solo durante el último año registraron un total de 83 asaltos.

Durante el último año fiscal las autoridades de migración en San Diego detuvieron a 26,086 inmigrantes y decomisaron de traficantes grandes cantidades de droga que incluyen 10.98 libras de marihuana, 2.90 libras de cocaína, 4.12 libras de metanfetamina y 5.707 onzas de heroína.

“El nuevo proyecto de muro primario representa un hito importante en nuestro trabajo para asegurar la frontera internacional, no solo mejora significativamente nuestra infraestructura existente en San Diego, sino que también marca el tercer proyecto simultáneo de muros en los Estados Unidos”, informó Ronald Vitiello, comisionado adjunto interino de Aduanas y Protección de Fronteras de Estados Unidos.

Para la comunidad en San Diego, el uso de millones de dólares para el refuerzo del muro poco ayuda en las necesidades reales del sur de California, aquel que cuenta con una movilidad de ciudadanos que supera los 35 mil peatones por día en San Ysidro y aún más automovilistas que buscan transitar en ambos lados de la frontera.

“Es muy conocida esta situación, el tiempo que toma para ingresar por la garita de entrada a San Ysidro, que es la garita con más volumen de vehículos y personas, la más concurrida a nivel mundial y donde sabemos por experiencia propia que se puede esperar hasta cinco horas, ahí es donde podrían emplear los fondos”, señaló Adriana Jasso, coordinadora del comité de Amigos Americanos en San Diego.

Activistas en San Diego también señalaron que el uso de recursos para el muro serían mejor implementados en la capacitación de agentes, que den un mejor servicio y calidad de vida a los residentes fronterizos.

El Comité de Amigos Americanos de San Diego señaló que el refuerzo del muro, así como la constante militarización de la frontera, podría complicar más el panorama para la comunidad inmigrante en San Diego y se dijeron preocupados por los últimos reportes de separación de familias y uso excesivo de la fuerza en la frontera.