No es necesario morir
LA COLUMNA VERTEBRAL
El Soporte Informativo Para Millones de Hispanos
Por Luisa Fernanda Montero
Murió ‘Cheo’ Feliciano. Murió el maestro. La noticia fue tan impactante y sorpresiva como el golpe que lo arrancó de este mundo sin darle una segunda oportunidad. En la madrugada del 17 de abril su Jaguar fue a dar con él contra un poste de luz. Si hubiese usado el cinturón de seguridad probablemente no habría muerto.
‘Cheo’ Feliciano fue un maestro, un artista, un genio de la salsa y del bolero que inspiró a generaciones de músicos e hizo delirar a los amantes de la música caribeña por más de medio siglo. De seguro llegó a armar parranda al cielo, pero se fue antes de tiempo. El único, sencillo y elemental acto de abrocharse el cinturón de seguridad a la hora de conducir le habría salvado la vida. Si lo hubiera hecho todavía estaría entre nosotros.
A veces, por ignorancia, ingenuidad, rebeldía, distracción o arrogancia, nos negamos a los más mínimos actos de cordura, sin pensar que la falta de sentido común nos puede costar la vida.
De acuerdo con datos de la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras, NHTSA, en el 2012 más de 33 mil personas murieron en las autopistas, calles y caminos de Estados Unidos. El cincuenta por ciento de las personas que murieron en accidentes de tránsito no usaban el cinturón de seguridad, lo que dicho de otro modo, significa que el cincuenta por ciento de esas personas se hubiesen podido salvar si hubieran tenido la simple precaución de abrocharse el cinturón de seguridad.
La muerte de ‘Cheo’ Feliciano dejo un vacío en el mundo, en su casa, en el corazón de su esposa y en el de sus hijos que no cesan de llorarlo, eso pasa día a día con las víctimas de los accidentes en nuestras calles.
Entonces, ¿Por qué no tomar conciencia? ¿Qué nos impide poner nuestra vida por delante, darle el valor que se merece y tomar las precauciones del caso? ¿Por qué no abrocharnos el cinturón de seguridad?
La seguridad en las carreteras es un tema que nos concierne a todos, y todos debemos asumir nuestra responsabilidad.
Este año la campaña “Abrochado o multado” que lidera el Departamento de Transporte de Estados Unidos, la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras, NHTSA, con el apoyo de la Red Hispana, les está recordando a los conductores de todo el país que usar el cinturón de seguridad no es opcional. Usar el cinturón de seguridad es una obligación legal. Al no hacerlo estaremos infringiendo la ley, y deberemos pagar las consecuencias: seremos multados por la policía.
Pero es que, como diría el cantante colombiano Charlie Zaa, uno de los más fieles admiradores del ‘Cheo’ que se ha unido a las muchas voces que se levantan para recordarle a los conductores, a través de esta campaña, que deben usar el cinturón, “ese es el menor precio que podríamos pagar”, porque lo que realmente está en juego es nuestra vida.
A su lado, artistas de la talla de Jowell y Randy y la Banda el Recodo de Cruz Lizárraga, entre otros, han aunado esfuerzos para hacer parte de la campaña de este año, que busca llegar a las conciencias de los miles de conductores que transitan nuestras carreteras y salvar vidas generando una serie de segmentos y mensajes que llegaran a miles de latinos a través de una red de más de 250 estaciones en todo el país, recordándoles que el cinturón de seguridad puede salvar sus vidas.
Abrocharte el cinturón es una obligación, no una opción. No es necesario morir. El cinturón puede salvarte la vida.
¿Y tú? ¿Estás listo para abrocharte el cinturón?