Problema Binacional de Contaminación
La gran cantidad de automóviles haciendo fila, sumada al lento cruce internacional, convierten a las garitas de San Ysidro y Otay como las zonas con mayor contaminación de toda la región, así lo confirmó el Centro para la Energía Sustentable de San Diego (CSE).
Los estudios del Proyecto Equinox, realizado por CSE, revelaron que las áreas de las garitas internacionales es en donde se registran los niveles de emisiones contaminantes más altos de la región.
“El problema es que [las autoridades fronterizas] están realizando mayores revisiones en San Ysidro y eso está causando mucha contaminación”, informó Serge Dedina, alcalde de Imperial Beach. “Incluso, la fuente de contaminación más grave del aire en la región esta en los cruces fronterizos”.
El CSE indicó que el aire contaminado llega al condado y por ello urge mayor infraestructura para agilizar los cruces fronterizos.
“Los cruces fronterizos son una fuente grave de contaminación del aire en Otay Mesa, en Tijuana y en San Ysidro. Por eso Tijuana está implementando su plan de transporte urbano y también estamos buscando mejorar las puertas fronterizas para que no haya tantos camiones que estén desechando el humo”, señaló Dedina.
TAMBIÉN PERSISTE CONTAMINACIÓN MARÍTIMA
La contaminación tambien se suscita en el mar. Los escurrimientos de aguas negras del Río Tijuana afectan las playas de Imperial Beach, Coronado y Mission Bay, estas de lado estadounidense de la frontera.
El mismo estudio ambiental reveló que por más de 200 días, el acceso a bañistas permaneció cerrado.
“La zona marítima del fraccionamiento de Playas de Tijuana ha tenido sus variantes pero principalmente ha estado con buena calidad y el foco rojo como lo marca el mapa, es San Antonio del Mar, cerca de la planta de tratamiento. Esa área sigue siendo un sitio que llama la atención”, consideró Margarita Díaz, directora del proyecto fronterizo de Educación Ambiental de Tijuana.
Para la organización Proyecto Fronterizo Binacional, los niveles contaminantes superan los 2 mil enterococos en el mar, cuando el permitido es de 200.
La revisión ambiental de las autoridades sandieguinas tiene validez oficial, mientras que para las autoridades mexicanas no siempre es tomada en cuenta.