Un gran uso del internet puede que haya contribuido al incremento en los síntomas de depresión y al comportamiento relacionado con el suicidio en los jóvenes, esto de acuerdo a una nueva investigación.

Los hallazgos apuntan a la necesidad de los padres de familia a monitorear el tiempo que los adolescentes pasan frente las pantallas de computadoras, teléfonos o tabletas.

“Este incremento en los problemas de salud mental en los jóvenes es muy alarmante”, dijo la profesora de psicología de la Universidad Estatal de San Diego (SDSU, por sus siglas en inglés), Jean Twenge. “Los adolescentes nos están diciendo que están batallando, y tenemos que tomarlo en serio”.

Twenge junto a la estudiante de maestría en SDSU, Gabrielle Martin y sus colegas catedráticos, Thomas Joiner y Megan Rogers de la Universidad Estatal de Florida, realizaron trabajo de investigación con información recolectada de más de 500 mil jóvenes estadounidenses por medio de dos sondeos realizados a nivel nacional de manera anónima, desde 1991.

Sus hallazgos también provienen de datos sobre suicidios del Centro de Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés).

De acuerdo a los académicos, el índice del suicidio de las mujeres adolescentes entre 13 y 18 años de edad incrementó en un 65 por ciento entre el 2010 y el 2015, y el número de mujeres adolescentes con sentimientos relacionados al suicidio como sin esperanza, contemplación del suicidio, planeo del suicidio o hasta intento de suicidio, incrementó en un 12 por ciento.

El número de mujeres adolescentes con síntomas graves de depresión incrementó en un 58 por ciento.

“Cuando primero vi los incrementos en los problemas de salud mental, no estaba segura de que los causó. Pero en estos mismos sondeos se incluye el pasatiempo de los jóvenes, y entre el 2010 y el 2015, los jóvenes incrementaron de manera drástica el tiempo que pasan frente a una computadora a comparación de otras actividades. Ese fue el cambio más significativo durante el periodo de cinco años, lo cual no es bueno para la salud mental”, dijo Twenge. “Aunque no puedo asegurar que el incremento en el uso del teléfono fue lo que causó el incremento en los problemas de salud mental, eso fue el mayor cambio en la vida de los adolescentes entre el 2010 y el 2015”.

Entre los hallazgos positivos, los académicos encontraron que los jóvenes que pasan mayor tiempo sin estar frente a una pantalla y realizan más actividades de interacción social en persona, o que hacen más ejercicio, tareas o hasta servicios religiosos, entre otros, cuentan con menos síntomas depresivos y menos sentimientos relacionados con el suicidio.

Los resultados fueron publicados en el diario académico de Ciencias de la Psicología Clínica.