Por Estephania Baez

Logan Heights, mejor conocido como Barrio Logan está ubicado en el centro de la ciudad de San Diego. Es una de las comunidades más antiguas del condado, sus orígenes se remontan desde mil ochocientos cuando era un área utilizada para los refugiados de la revolución mexicana. Al paso de los años se convirtieron en un grupo étnico predominante de dicha área, por lo que actualmente más del ochenta y cinco por ciento de la población es de origen hispano. Hoy en día Barrio Logan es conocido por sus historiadores, su arte, los llamados chicanos y por supuesto, el parque chicano, un espacio ubicado debajo del puente Coronado utilizado como punto de reunión para la comunidad México- Estadounidense.

A pesar de encontrarse tan cerca del corazón de la ciudad considerada una de las más metropolitas en Estados Unidos, el Barrio Logan siempre se distinguió por tiroteos, muertos, pandillas y un sinfín de actos delictivos que ocurrieron en la época de los ochenta y noventa, inclusive más del sesenta por ciento de los crímenes registrados en esos años en el condado de San Diego ocurrieron en el Barrio Logan.

Víctor Alatorre, un oficial del Departamento de Policía de Barrio Logan destacó, “Barrio Logan, eran puras pandillas, graffiti en las paredes, peleas y balaceras, pero ahora todo es más tranquilo. Muchos niños ya van a la escuela, ya está todo limpio y la gente está más tranquila. Ya puede salir, no como antes.

Algunas casas abandonadas y misteriosos callejones guardan ciertos secretos de cientos de crímenes sin resolver que se cometieron en esa época, en donde cárteles mexicanos se adjudicaron algunas viviendas para cometer sus asesinatos e inclusive ocultar a los secuestrados como casas de seguridad.
“Se escuchaban mucho de mafias y sus operaciones, actualmente ya está todo más tranquilo. Los negocios han incrementado y creo que es mejor para todos los que estamos residiendo aquí.” Manifestó Nora, una estudiante de derecho, quien fue interceptada por La Prensa en camino a su escuela.

Hoy en día, El Barrio Logan ha tenido una transformación significativa, ya que es una comunidad que se cansó de tanta violencia, alzó la voz y poco a poco construyeron un lugar digno donde vivir, alejados del crimen y de tantas fechorías. Además de la comunidad, es el gobierno del condado de San Diego el cual ha prestado más atención a esa área de la ciudad. Tan solo en los últimos dos años han invertido más de seis millones de dólares, los cuales han sido destinados para la construcción de escuelas, bibliotecas, albercas y otros espacios públicos recreativos que tienen como principal objetivo el goce de la comunidad fronteriza.

Por otra parte, de los ocho mil indigentes registrados en el condado de San Diego, más del veinticinco por ciento pertenecen a Barrio Logan, por lo que desde hace tres años, cada mes de noviembre, ciertas áreas del barrio se convierten en un refugio para quienes no tienen un lugar donde vivir en épocas de frío. Es la calle Logan Height, la cual se transforma en un refugio invernal con una capacidad de doscientas personas y que operará hasta el próximo mes de junio. Sin embargo, regidores como David Álvarez que es originario de ese barrio, destacó que aún falta apoyo por parte del gobierno para dicha zona.

Entre los proyectos destinados para dicha comunidad, fue creado un nuevo centro destinado para otorgar ayuda a trabajadores del condado, el cual impartirá talleres y cursos de capacitación a empleados de la región. De igual manera, proporcionará apoyo a desempleados para vincularnos con empresas de la localidad. Este centro de apoyo está ubicado en la Avenida Imperial.
Fue considerado por muchos años como el barrio más peligroso del condado de San Diego, pero actualmente se ha convertido en uno de los lugares con mayor potencial para comercios y para aportar constante ayuda a la comunidad.