Familia disfuncional
Comentario:
Por Humberto Caspa, Ph.D.
El concepto de disfuncionalidad es asociado con familias que mantienen un cúmulo de problemas dentro de su estructura. El prolongado abuso del padre y la madre –con predominación del primero más que del segundo— a los hijos es normalmente una de las con-secuencias graves que suele ocurrir en este tipo de relaciones.
Lo que sucede en la familia de Dick Cheney, ex vicepresidente de la Re-pública, no es precisamente un caso típico de disfuncionalidad familiar, pero si contiene algunos elementos que ha puesto a padres e hijos en un conflicto interno.
Recientemente la hija mayor de los Cheney, Elizabeth (Liz), aludiendo razones de índole familiar, renunció a sus aspiraciones de seguir los pasos de su padre y convertirse en senadora del estado de Wyoming.
“Serios problemas de salud han surgido recientemente en mi familia, y debido a estas circunstancias, he decidido descontinuar mi campaña [al Senado]…”, dijo.
Su renuncia tiene dos vertientes: una familiar y otra política. La vertiente familiar no está precisamente relacionada con sus hijos, sino con su hermana y sus padres.
Los Cheney tienen otra hija menor, cuyo nombre es Mary, quien es conocida en el medio político y en el mundo amarillista por su inclinación sexual. Mary Cheney es lesbiana; ha contraído matrimonio con su pareja Heather Poe hace un poco más de un año.
Durante su campaña política, Liz Cheney manifestó que un matrimonio debe ser entre un hombre y una mujer y que, por consiguiente, no está de acuerdo con los matrimonios gay.
De acuerdo a Poe, esposa de Mary Cheney, Liz es una hipócrita: “No tuvo ningún problema en decirnos lo feliz que estaba por nuestra felicidad”.
Obviamente el discurso de las hermanas Cheney devastó a su familia, restó las posibilidades de victoria de Liz al Senado, levantó olas en las filas republicanas y proveyó mucha gasolina amarillista.
Por otra parte, el senador íncumbente Mike Enzi es uno de los líderes con-servadores más respetados del Partido Republicano en Wyoming. Inicialmente había rumores de que no iba a buscar la reelección, pero tras el anuncio de Mary Cheney de presentarse como candidata, Enzi decidió participar en las elecciones de noviembre.
La mayoría de la población de Wyoming es conservadora y la candidatura de Liz Cheney, a pesar de ser hija de un político conocido, era considerada como oportunista debido a que vivió durante mucho tiempo en Virginia y apenas se había mudado a Wyoming.
El hecho de pronunciarse en contra de su hermana y los gays siguió un esquema político que buscaba el apoyo de las bases conservadoras de Wyoming. La estrategia no funcionó. Lo que hizo más bien es crear un problema serio en su familia y reanimó el conservadurismo del electorado local.
Los Cheney tienen un problema serio al interior de su familia. Mientras unos no aceptan plenamente el derecho a las libertades individuales, la disfuncionalidad continuará en su seno familiar.
Humberto Caspa, Ph.D., es profesor e investigador de Economics On The Move. E-mail: hcletters@yahoo.com