Liberan a Dreamer tras Salir a Mexico por Accidente
La pesadilla terminó para un beneficiario del programa Acción Diferida para los Llegados en la Infancia, o DACA, que enfrentaba una posible deportación luego de que abandonó el país por error.
Orr Yakobi, estudiante de la Universidad de California, San Diego (UCSD, por su siglas en inglés) fue liberado el pasado viernes de la custodia de autoridades migratorias luego de haber permanecido tres días en el centro de detención de Otay Mesa.
El joven de origen israelí, temió lo peor luego de que días atrás, cruzará la frontera a México por accidente luego de que el conductor del vehículo en que viajaba tomó la autopista en dirección sur en lugar de dirección norte una vez que salieron del centro comercial Plaza Las Américas.
En cuestión de segundos ya estaba prácticamente en la aduana mexicana sin posibilidad de volver a Estados Unidos, recordó Yakobi.
Su compañero de cuarto y él regresaron al país por la garita de San Ysidro e intentaron de explicar lo sucedido al oficial de aduanas, pero aun así, detuvo al estudiante de UCSD al considerar que violó las condiciones de su permiso DACA que establece que debe contar con un permiso tramitado con anterioridad para salir del país.
Siguieron días de mucha incertidumbre, en los cuales, el estudiante narró que buscó fuerza en su fe y con el apoyo de otros internos en Otay Mesa que atraviesan por una situación similar.
Afuera, hubo mucha presión por parte de la comunidad y líderes electos para que se reconsiderara el caso del estudiante de UCSD. Finalmente, a menos de una semana de su detención, autoridades migratorias concedieron la liberación sin condiciones de Yakobi.
“Estoy feliz de que esto haya terminado y espero que podamos tomar esto para que asegurarnos que no le pase a nadie más”, declaró el joven a horas de ser liberado del centro de detención. “Fue un error, aprendimos de ello y ahora vemos hacia adelante”.
Su abogado Jacob Sapochnick dio crédito al esfuerzo coordinado de funcionarios y autoridades educativas para presionar a autoridades migratorias de que el caso de su cliente se trató de “un error honesto”.
“No he visto a nadie que haya sido liberado en tres días, normalmente los tienen adentro un par de semanas, mínimo”, refirió el abogado en alusión al tiempo que estuvo en Otay Mesa.
Yakobi, de 22 años, quien llegó a Estados Unidos con su familia de Israel cuando tenía cinco años, quiere enfocarse ahora en terminar las dos clases que le quedan para graduarse de UCSD y posteriormente, buscar un buen trabajo.
Mientras estuvo recluido en el centro de detención, un juez federal ordenó la restauración parcial del programa DACA hasta que se resuelvan los litigios pendientes en torno a este amparo migratorio.
Por ello, Yakobi podría renovar su permiso, el cual vence en marzo próximo.