Saliendo del Pozo de la Adicción
Yo he estado ahí.
Yo sé lo que es ver como alguien a quien amamos se hunde en el camino de la dependencia, del alcoholismo o la drogadicción.
Yo sé lo que es vivir con esa barrera invisible que nos impide ayudar al ser querido. Yo sé que esa barrera solo puede romperla el enfermo. Solo la persona que es víctima de la adicción puede decidir cuando sacarla de su vida. Su deseo de hacerlo es el único motor capaz de impulsar su recuperación.
En el camino, después de estar determinado a salir de la adicción y buscar ayuda, son indispensables las manos amigas. Su entorno es determinante.
¿Qué podemos hacer para ayudar al enfermo?
Lo primero que entender es que el alcohólico es un enfermo, igual que el drogadicto o el fumador.
El alcoholismo está definido como una condición en la que el enfermo padece una fuerte necesidad de ingerir alcohol, de forma que existe una dependencia física del mismo, que se manifiesta a través de determinados síntomas de abstinencia cuando no es posible su ingesta. El alcohólico no tiene control sobre los límites de su consumo y suele ir elevando a lo largo del tiempo su grado de tolerancia al alcohol.
Una vez que el enfermo entienda que lo está, lo más indicado es buscar ayuda profesional. Ese proceso, debe darse de común acuerdo con el enfermo.
Es muy posible que en el proceso, incluso después de que el enfermo acepte su situación, haya varias recaídas. El apoyo del entorno familiar y social en esos momentos es fundamental. Por eso la ayuda profesional es prioritaria.
Un psicólogo o terapista experto es la persona indicada para ayudarnos en el proceso de recuperación.
Estos especialistas pueden ayudar saben qué es lo que está pasando en el cuerpo y en la mente del enfermo y saben qué es lo que necesita.
Pero existen diversas alternativas clínicas, psicológicas y terapias en grupo.
Aunado a la asesoría de expertos, Alcohólicos Anónimos cuenta con sedes en todo el mundo y es una organización que constituye una magnífica posibilidad de recuperación.
Aun así, el camino a seguir dependerá siempre de la situación del paciente. En muchos casos este necesitará pasar por un proceso de desintoxicación o ser hospitalizado.
Los gobiernos locales y el gobierno federal tienen recursos para ayudar a las personas con algún tipo de adición.
Si necesita información puede acudir al Centro Nacional de Información sobre la Salud Mental (SAMHSA, por sus siglas en inglés). Visite www.mentalhealth.samsha.gov o llame al (800) 789-2647. En la página de alcohólicos anónimos (www.aa.org) también podrá encontrar un grupo de apoyo en su área. Otro valioso recurso es el Consejo Nacional de Rehabilitación de Alcohol y Drogas para los Adultos Mayores, cuyo sitio en linea es https://rehabnet.com/.
Le aseguro que hay pocas cosas más gratificantes que ver a un ser querido salir del pozo de la adicción. No desista. Busque ayuda.