Por 15 años, María Martínez ha luchado incansablemente para que Barrio Logan sea un lugar con menos contaminación.

“He visto muchas mejoras en estos años”, dijo Martínez, quien es madre de tres hijos. “Antes no miraba a mi alrededor.

Ahora veo la diferencia”.

Lorena Chávez, por su parte, ha donado su tiempo para ayudar a que Old Town National City esté libre de dañinos químicos provenientes de talleres mecánicos.

“Me siento más segura de alzar mi voz”, indicó Chávez. “Es muy importante como miembro de la comunidad participar en esto”.

El matrimonio de Erick y Axelia Ortega también ha puesto su granito de arena para ayudar a que Logan Heights disfrute de mejor calidad del aire.

“Como parte de la comunidad, tratamos de ayudar en lo que podamos”, afirmó Erick Ortega. “Esta es una lucha de hace muchos años”.

Todas estas personas y familias, residentes de algunas de las áreas que sufren de mayor contaminación en todo el Condado de San Diego, han dado de sí mismos para apoyar a la Environmental Health Coalition, una de las organizaciones que más lucha por que haya justicia ambiental en la parte sur de San Diego.

La semana pasada, el jueves 10 de abril, la misma Environmental Health Coalition, tomó tiempo para reconocer a Martínez, Chávez, y los Ortega, y a otros tantos miembros de la comunidad que forman parte de los Community Action Teams, equipos de voluntarios que salen a las calles de sus vecindarios para exigir aire más puro, agua más limpia, niños más saludables.

Durante la ceremonia de los 2014 Awards Celebration: Victory for Healthy Communities en Casa del Prado en Balboa Park, todos estos voluntarios recibieron el Community Award, un premio que reconoce la intensa labor que estos miembros de la comunidad han realizado por años para crear vecindarios más limpios y autosuficientes.

“Son el corazón y el alma de Environmental Health Coalition”, dijo Diane Takvorian, directora ejecutiva de EHC. “Desde la perspectiva de una organización comunitaria, es importante que los mismos residentes de las comunidades que servimos tomen sus propias decisiones. Son personas que en verdad quieren involucrarse y hacer cambios positivos en sus vecindarios”.

Como parte de los cinco actualez Community Action Teams (que están distribuidos desde Logan Heights hasta Tijuana), los voluntarios reciben entrenamientos acerca de leyes del medio ambiente, los derechos de los inquilinos y cómo hablar en público. Más que nada, se les prepara para que sean líderes en sus comunidades, de acuerdo a Takvorian.

Martínez, por ejemplo, dijo que antes le daba miedo hablar con otras personas. Ahora, se siente segura de sí misma y conoce sus derechos. La madre de 38 años indicó que dio el primer paso para mejorar su comunidad de Barrio Logan cuando su hijo fue diagnosticado con asma cuando cursaba el tercer grado.

“Muchos de nosotros, como somos de bajos ingresos, solo nos enfocamos en ir de la casa al trabajo y del trabajo a la casa”, dijo Martínez, quien también funge como promotora comunitaria para EHC. “No nos damos cuenta o no nos importa lo que ocurre a nuestro alrededor. O quizá sea que pensamos que a nosotros no nos van a hacer caso. Pero yo soy prueba que uno si tiene voz y que debemos hacerla valer”.

Además del Community Award para los Community Action Teams, Environmental Health Coalition presentó reconocimientos a Ruth Heifetz por toda una vida dedicada a la justicia ambiental; a Alejandra Sotelo-Solís, la regidora de National City que ha ayudado a mejorar la calidad de vida en su ciudad; y a Lara Gates por ser la voz de la Ciudad de San Diego en los planes de mejoras en Barrio Logan.

“Con estos reconocimientos estamos celebrando comunidades saludables; estamos celebrando los éxitos que hemos logrado en estas comunidades”, dijo Takvorian.

Para conocer más acerca de la labor de la Environmental Health Coalition, visite www.environmentalhealth.org.