Por Silvia Munguia

Adela Navarro Bello es co-editora del semanario Zeta en Tijuana, cuenta con una larga trayectoria y ha recibido varios reconocimientos como el Premio Internacional de Libertad de Prensa en 2007 y ha sido nombrada una de las 150 mujeres más valientes del mundo por la revista News Week.

El alto nivel de profesionalismo de Navarro queda evidenciado en los importantes reportajes que ha cubierto como el levantamiento Zapatista en 1994 y la captura de Jorge Hank Rhon en 2011. Recientemente, fue invitada a la Universidad de California, San Diego (UCSD por sus siglas en Inglés) a participar en el Programa de Liderazgo del Pacífico, el cual trae a reconocidos líderes de toda la región del Pacífico para participar en diálogo, investigación y docencia con estudiantes, profesores y la comunidad de San Diego.

El pasado 23 de abril, Navarro sostuvo una presentación titulada, “ México entre política y crimen organizado” en el Great Hall de dicha universidad. En este espacio, la periodista resumió la situación actual de su país, denunciando la censura implementada por el nuevo gobierno de Enrique Peña Nieto y la creciente inseguridad ante el narcotráfico.

La periodista advirtió que “aunque los crímenes continúan, la prensa habla menos de ello”. Esto se debe a que los investigadores ahora cuentan con menos acceso a la información que durante el sexenio de Calderón.

Entrando al tema del narcotráfico a nivel local, Navarro informó que el aumento de crímenes en Tijuana durante el mes de abril, se debe a la falta de estrategia del gobierno. Hablando en términos generales, Navarro afirmó que la solución no está en las manos del gobierno estadunidense ni en la legalización de la marihuana (aunque sí espera ver el efecto que esto tendrá en los estados de Washington y Colorado), sino en implementar medidas integrales como facilitar el acceso a la educación e incrementar el número de empleos.

En entrevista para Alberto Díaz-Cayeros, director del Centro de Estudios Mexicanos-Estadunidenses en UCSD, Navarro habló de su labor en Zeta resaltando su relación profesional con el fundador del semanario, Jesús Blancornelas.

Navarro se inició como periodista en Zeta al mismo tiempo que cursaba la carrera de comunicación en la Universidad Autónoma de Baja California (UABC). De sus 23 años ejerciendo periodismo, 17 fueron al lado de Blancornelas, a quien llamó su “mentor, maestro, y colega”, mostrando admiración y respeto por el ya fallecido periodista, mientras que Díaz-Cayeros le otorgó el adjetivo de “legendario”.

Tal otorgamiento es fácil de entender, pues fue Blancornelas y, el injustamente asesinado, Héctor Félix Miranda, “El gato Félix,” quienes en 1980 fundaron el semanario Zeta, después de que el gobierno Priista les arrebatara el periódico ABC en 1979.

Debido a este contexto, Zeta se empezó a imprimir en San Diego y a distribuir en Tijuana, lo cual continúa ocurriendo hasta la fecha. Sin embargo, las noticias que se publican en el semanario tienen más que ver con lo que sucede en Tijuana que en San Diego.

Navarro señaló que Zeta “no es un negocio meramente económico sino un proyecto de libertad de expresión…

Actualmente, el gobierno municipal no se anuncia en Zeta porque el creía que esto le garantizaría notas a su favor” y el periódico no funciona así.

La periodista agregó que en ningún momento ha habido auto censura en el semanario. “Lo que sí existe es un alto nivel de responsabilidad con lo que se publica ya que debe ser confirmado por tres fuentes distintas de autoridad, si no se confirma no se publica, esa es nuestra mayor protección”, dijo refiriéndose a la gran credibilidad de la que goza el periódico.

Finalmente, Navarro aconsejó a los jóvenes que apenas comienzan su carrera como periodistas a que “lean mucho”, ya que la lectura los ayuda tanto en su desarrollo mental como en su habilidad para redactar. Pero, sobre todo les dijo “que sean sensibles a lo que pasa en su sociedad. Muchos periodistas se vuelven oficialistas porque están cerca del gobierno y lejos de la sociedad”.