Por Estephania Baez

El número de personas sin hogar en el Condado de San Diego se ha convertido ha posicionado al sur de california como el cuarto lugar del país con mayor número de indigentes, la mayoría se encuentran en el corazón de la ciudad, vagando por las calles, a unos cuantos metros de la bahía. El gobierno de Estados Unidos define a una persona como indigente a quien haya carecido de vivienda por más de un año seguido o que haya perdido su hogar en diferentes ocasiones en un periodo de tres años y que además cuenta con una discapacidad para conseguir un empleo.

De acuerdo a datos del Departamento de Desarrollo Urbano de Estados Unidos, actualmente el número de indigentes en San Diego es de 8,742 personas a comparación de 8,506 con el 2014, lo que equivale a un incremento del 2.8 % de los cuales el 48% duerme en las calles.  Según el mismo informe, durante el 2007, San Diego se posicionaba como la ciudad número 12 de Estados Unidos con el mayor número de indigentes, por lo que en ocho años, subió ocho lugares, cifras que de acuerdo a expertos son debido a la cercanía que la ciudad tiene con la frontera, ya que recibe a individuos de distintas partes del país e inclusive otros provenientes de México y Sudamérica. Otra de las ciudades que ocupan los primeros lugares son Seattle, Los Ángeles y Nueva York.

De acuerdo al Departamento de Vivienda del Condado de San Diego, el 15% de la población indigente del Condado, sufre de algún tipo de enfermedad mental, algunos debido a su labor como veteranos en las guerras que se ha enfrentado Estados Unidos. Por otra parte, el 17% registró problemas de alcoholismo y abuso de otras sustancias. Por lo que en noviembre del 2015, el Presidente de la Comisión de Vivienda de San Diego, Richard Gentry manifestó que no hay una solución a dicha problemática, si no la implementación de varios servicios para combatir cada una de las problemáticas. Algunos, únicamente necesitan un refugio donde pasar la noche, otros medicamentos, terapias y otros encontrar a sus familiares. Por lo que se destinaron más de diez millones de dólares a programas dedicados para indigentes en la ciudad, la mayoría enfocados en terapias y medicamentos para quienes sufren de mayor afectación.

Melinda Hohman, Directora de servicios sociales en la Universidad Estatal de San Diego, mencionó que “Los altos costos de vivienda en el Estado de California, especialmente al sur de la entidad han sido un factor importante para que las personas se queden sin hogar” añadió que actualmente el 48% de los indigentes que vagan por las calles de la ciudad no son acreedores a un refugio debido a la sobresaturación de personas.

Fue en septiembre de este año cuando el consejo de supervisores de San Diego aprobó de manera unánime utilizar más de diez millones de dólares provenientes del programa de servicios médicos de California bajo el argumento que la mayoría de los indigentes en el condado contaban con una discapacidad mental. De esta manera para los próximos años se construirán viviendas que funcionen como clínicas para recibir a los más de ocho mil individuos sin hogar en San Diego.

Además durante los meses de invierno se refuerzan los programas para proveer ayuda a estas personas como lo son la entrega de cobijas, alimentos y los trabajadores de gobierno aumentan sus horas de trabajo para registrar a individuos que necesiten ser localizados por sus familiares.

El fenómeno “Homeless” de San Diego ha sido tema sobre la mesa del mismo Presidente de la Nación, Barack Obama, por lo que desde el 2010 creó un programa dedicado a apoyar a estas personas, sin embargo, en ese mismo periodo, el número de personas sin hogar en San Diego ha incrementado de manera significativa. A pesar de los múltiples esfuerzos por organizaciones, mandatarios y mismos miembros de la comunidad por proveer ayuda a este sector de la población, se desconoce cuál es el principal factor que ha hecho que incremente estos individuos en la que es reconocida como la ciudad más fina de América.