La detección de plomo y otros contaminantes en el agua de cinco escuelas en el Condado de San Diego, han puesto en alerta a organizaciones del medio ambiente y asambleístas en el estado de California, que aseguran de no tomar acción padres y autoridades, los daños en el desarrollo y rendimiento académico de los menores de edad en la región, serán irreversibles.

“El plomo causa daños al cerebro, lento aprendizaje, hiperactividad, mal comportamiento, agresividad, daña la capacidad de aprender y se está impactando desde chiquitos y los padres no lo saben hasta que entran a la escuela”, informó Leticia Ayala, directora de campaña para niños saludables en la Coalición de Salud Ambiental de San Diego.

Ante el problema del agua con plomo, las autoridades de los distritos escolares afectados iniciaron pruebas y dieron agua embotellada en las zonas afectadas. Sin embargo, la coalición de salud ambiental en San Diego advierte que los menores de 6 años son quienes corren un riesgo mayor.

“Muchas de nuestras familias, especialmente las latinas, viven este problema, porque es un tóxico silencioso, el cual se encuentra dentro de las casas”, agregó Ayala. “Muchos de nosotros entramos a nuestra casa pensando que está libre de tóxicos, que están seguros nuestros niños, pero en realidad el plomo se encuentra en nuestras paredes, en la pintura de casas fincadas antes de 1978”.

La agencia de Salud y Servicios Humanos en el condado de San Diego recibe un promedio de 100 casos por intoxicación de plomo en menores al año y en Estados Unidos existe un promedio de medio millón de afectados, estadística que aseguran puede ser peor debido a la falta de síntomas y el alcance al metal en la vida cotidiana.

La Coalición recomendó el uso de cotonetes para la identificación del plomo en espacios tan sencillos como las paredes de una habitación. Objetos como las ollas artesanales, juguetes, maquillaje, pintura, joyería e ingredientes de cocina importados, al tener contacto con los cotonetes especiales, adquieren un tono fosforescente cual revela el contenido del metal.

Jerry Brown, gobernador de California, firmó el pasado 13 de octubre la ley AB 746 o el Acta del Agua Potable Segura en California, que esperan termine con parte del riesgo de millones de pequeños.

Desde el próximo primero de enero, y por efecto de la ley AB 746, los residentes de California serán protegidos por una junta estatal de control de recursos hídricos, cuales llevarán a cabo la realización de investigaciones y programas que garanticen un suministro de agua confiable en escuelas y viviendas.