Han pasado más de 50 años desde la aprobación de la Ley de Igualdad Salarial de 1963, pero las latinas están muy atrasadas en el área de salarios salarios.

De acuerdo con los datos de la Asociación Nacional para las Mujeres y Familias (NPWF, por sus siglas en inglés), las latinas en los Estados Unidos reciben un pago de solo 54 centavos por cada dólar pagado a hombres blancos no hispanos.

Los latinos son la población minoritaria más grande y en promedio ganan menos que cualquier otra demografía. La revista Forbes reportó este mes que en comparación con los hombres blancos, las mujeres asiáticas ganan 85 centavos, las afroamericanas ganan 61 centavos, las nativas americanas y nativas de Alaska ganan 59 centavos.

Las latinas son las principales proveedoras de ingresos en más de 3 millones de hogares, y las que toman las decisiones que representan un mil millones de dólares en poder adquisitivo en los Estados Unidos, esto según el Consejo Laboral para el Avance Latinoamericano. Esto también significa que sus hogares dependen en gran medida de sus salarios para poder subsistir y salir adelante.

Desafortunadamente, el 40 por ciento de esos hogares vive por debajo del umbral de la pobreza.

En un análisis de la NPWF sobre la brecha salarial en los 25 estados con el mayor número de latinas que trabajan a tiempo completo, California estaba en la parte superior de la lista. La cantidad de latinas que trabajan a tiempo completo durante todo el año en el estado es 1.59 millones, con un salario promedio de 30,624 dólares anuales. El salario medio para los hombres blancos no hispanos en el estado es de 71,875 dólares, dejando una brecha salarial anual de 41,251 dólares.

Un informe del Instituto para la Investigación de Políticas de la Mujer publicado en octubre muestra que un adulto que trabaja solo necesita ganar 2,751 dólares al mes, o 33,012 dólares anuales para estar económicamente seguro.

Con tantas estadísticas sorprendentes, el 1 de noviembre marcó el día de igualdad de pago para las mujeres latinas para crear conciencia sobre la brecha salarial y sus efectos negativos en las latinas y sus familias.

Nancy Maldonado, directora ejecutiva interina de la Federación Chicana del Condado de San Diego, explicó cómo se puede abordar la brecha salarial. “Es importante hablar sobre el tema porque el primer paso para cambiar es la concientización”, afirmó.

Una nueva investigación llevada a cabo por LeanIn.Org y SurveyMonkey, en asociación con UnidosUS, encontró que hay una sorprendente falta de conciencia sobre la brecha salarial que enfrentan las latinas. Casi uno de cada tres estadounidenses no está al tanto de la brecha salarial entre las mujeres latinas y los hombres blancos, pero el 72 por ciento de los estadounidenses cree que no es justo. Además, el 68 por ciento cree que el sesgo en contra de los inmigrantes es un factor en la brecha salarial que experimentan las latinas.

La representación política también puede contribuir para terminar con la desigualdad salarial al elegir representantes que apoyan los esfuerzos para terminar con las disparidades salariales, así como los esfuerzos que conducen a una mejor fuerza laboral.

Numerosos legisladores también están pidiendo cambios para terminar con la desigualdad salarial. Kamala Harris, senadora demócrata por California, entre otros líderes electos,habló sobre el día de Igualdad de Salario para latinas y dijo que es hora de aprobar una legislación para garantizar un pago justo. También emitió declaraciones a través de Twitter pidiendo que se ponga fin a la brecha salarial de género.

El congresista de San Diego, Scott Peters, tuiteó sobre la necesidad de aumentar el salario mínimo, aprobar la Ley de Equidad de Cheques, fortalecer las protecciones en el lugar de trabajo y ampliar las oportunidades de ocupaciones de alta remuneración para todas las mujeres.

La Ley de Equidad de Cheques es un proyecto de ley propuesto en el Congreso para garantizar la igualdad de remuneración por igual trabajo para todos los estadounidenses. La Unión Americana de Libertades Civiles establece que la ley haría cambios críticos a la Ley de igualdad de remuneración, lo que incluye exigir a los empleadores que demuestren que las diferencias salariales se basan en factores distintos al sexo y prohibir las represalias contra los trabajadores que consultan las prácticas salariales de sus empleadores o divulgan sus propios salarios.

Maldonado también explicó la gravedad de la cuestión, “Cerrar la brecha salarial para las latinas requerirá trabajo y atención durante todo el año y comienza con el reconocimiento de que esta disparidad salarial tiene un impacto inmediato y grave en nuestra comunidad”.

“Las mujeres latinas deben trabajar diez meses en el próximo año calendario sólo para obtener el promedio que gana un hombre blanco en un año. Esto no solo perjudica a las familias y la economía, sino que también perpetúa un ciclo de pobreza. Encontrar soluciones a la disparidad salarial que enfrentan las latinas merece más atención”, Maldonado también dijo.