A las madres se les hacen todo tipo de celebraciones, se les ofrecen regalos desde electrodomésticos hasta perlas y diamantes, se les menciona como sinónimos de entereza, amor, abnegación y todas las demás virtudes que existen. Me acuerdo que cuando estaba en el colegio, siempre se celebraba el Día de la Madre con bombos y platillos, se hacían actuaciones de gala y no me acuerdo ni de una sola vez – mientras estuve en el colegio – que se haya celebrado el Día del Padre. Creo, y si no me equivoco, en esas épocas no se celebraba, el festejar el Día del Padre es algo relativamente nuevo que se viene celebrando solo desde hace unos pocos años atrás.

¿Será que es un prejuicio el pensar que solo las madres pueden ser buenas madres (valga la redundancia)?

¿Será que es un límite o traba o tabú cultural pensar que todos los hombres son sinvergüenzas, malos padres, borrachos y mujeriegos?

¿Será que de generación en generación, las madres seguimos criando hijos machistas que no se ocupan de tareas del hogar lo que incluye el cuidado de los hijos?

¿Será que la misma sociedad ha excluido a los hombres de estas tareas a las cuales si los volviera a incluir se evitarían muchos problemas de tipo familiar?

¿Será que los hombres se desentendieron de estos quehaceres domésticos desde las épocas de conflictos armados cuando tenían que ir a las guerras y las mujeres se quedaban cuidando los hijos, la casa y las siembras?

Sea la razón o razones que sean, la vida y las circunstancias han excluido a los hombres de la interminable tarea de criar hijos y de las tareas del hogar. Pero ya los tiempos han cambiado y ahora ya se ven muchos más varones en el mercado, algunos son buenísimos cocineros, y también ya compran panales y crían hijos. En mi experiencia personal de trabajo, puedo decir que he conocido padres más abnegados que muchas madres, padres merecedores de la custodia de sus hijos, padres admirables en cuanto amor y, paciencia.

Por supuesto toda regla tiene su excepción y las generalizaciones en este tema o en cualquier otro son injustas porque cada caso, cada familia, cada persona es original y genuina. Pero ahora que se acerca el Día del Padre me emociona, me agrada resaltar y recordar a algunos hombres que como padres marcaron la diferencia en mi vida; recuerdo a algunos que merecedores de una sentencia favorable para ejercer la custodia de sus hijos tuvieron que luchar no solo con los medios de prensa o la media que no puede aceptar a veces cuando una Juez (mujer) escoge al padre para ejercer la custodia de sus hijos , sino también con la sociedad en general que siempre los considera como incapaces o inútiles para el cargo de ser padre, otros a los que vi en cada audiencia judicial siempre apoyando el caso de un hijo en problemas con las leyes penales, u otros acompañando a sus hijos a las sesiones de rehabilitación por abuso de sustancias toxicas.

Finalmente no puedo dejar de mencionar a un hombre que ha hecho siempre reír a toda mi familia con sus ocurrencias, un hombre que tiene dotes de poeta, a un hombre que tiene frases celebres que recordar así como un oído fino para la música y un ritmo de baile inigualable, un hombre con una responsabilidad e integridad a prueba de balas, un hombre admirable por su lealtad y amor por su familia, a ese hombre le dedico estas líneas, mi gratitud y mi admiración: Ese hombre es mi padre: Guillermo Kcomt Checa.

¡¡Feliz Día Papi!!.